Todo lo que hay es la Consciencia. Cuando la Consciencia-en-descanso se pone en movimiento surge la manifestación. El funcionamiento de la manifestación es la VIDA, tal como la conocemos. Nada puede ocurrir en la vida, a menos que sea la voluntad de la Fuente o Consciencia.
Cuando se pierde la fe en la voluntad de Dios -¡incluso esto sería la voluntad de Dios!- entran en juego la benevolencia y la compasión. Cuando se pierden la benevolencia y la compasión, surge la moralidad con sus "haz esto" y " no hagas aquello". Cuando se pierde la moralidad, entran los dogmas religiosos. Como la religión es la cáscara y no el meollo de la fe en Dios, comienzan las guerras religiosas.
Ramesh S. Balsekar
(¡A Quién Le Importa!)
Ufffff! profundo...
ResponderEliminarGracias y un abrazo!
Excepcional esa descripción descendente de ese "oscurecimiento espiritual" que, como Ramesh destaca, también es la voluntad de Dios.
ResponderEliminarGracias Guillem, y abrazos!!