Para entender lo que sigue, el lector debe permitirse -ahora y en cada lectura posterior- alcanzar un estado mental adecuado. Se os pide -transitoriamente, por supuesto- que dejéis de lado todas vuestras opiniones filosóficas, religiosas y políticas, y que seáis casi como los niños, que no saben nada. Nada, eso es, excepto que realmente oís, veis, sentís y oléis. Suponed que no estáis yendo a ningún lado salvo aquí, y que nunca hubo, hay ni habrá otro tiempo salvo el presente. Simplemente sed conscientes de lo que en realidad es, sin atribuirle nombres y sin juzgarlo, puesto que estáis palpando la realidad misma y no las opiniones sobre ella. No tiene sentido tratar de suprimir los borbotones de palabras e ideas que transitan por la mayoría de los cerebros adultos, de modo que si no se detienen, dejadlas seguir como quieran y escuchadlas como si fuera el sonido de tráfico o el cloqueo de las gallinas.

Dejad que vuestros oídos oigan lo que quieren oír, dejad que vuestros ojos vean lo que quieran ver; dejad que vuestra mente piense lo que quiera pensar; dejad a vuestros pulmones respirar a su propio ritmo. No esperéis ningún resultado especial, puesto que en este estado desprovisto de palabras e ideas, ¿dónde puede existir pasado o futuro, y dónde alguna noción de propósito? Deteneos, mirad y escuchad... y permaneced aquí un momento antes de proseguir la lectura. Alan Watts (El camino del Tao)


4 jul 2009

LA LLAVE ESTÁ EN LA REPETICIÓN.
Introducción del libro "Un dueto de uno" de Ramesh S. Balsekar.

Una de las características más claramente visibles de les escrituras sagradas orientales es la repetición recurrente de la Verdad básica en sus diferentes aspectos, detallada com palabras diferentes, e ilustraciones y ejemplos diferentes. La intención es darle una oportunidad razonable al discípulo menos inteligente.
También en el Ashtavakra Gita se consigue una cantidad considerable de repeticiones. Una ventaja específica de este estilo repetitivo es que, por alguna razón misteriosa, cierta afirmación tendrá un impacto repentino en una persona en particularen un momento en particular, a pesar de que esa afirmación quizá haya sido repetida varias veces anteriormente. E incluso para aquellos que ya han comprendido algo completamente, una afirmación en particular realizada dentro de un contexto en particular a menudo revela un aspecto sutil que había escapado a su atención anteriormente. Por lo tanto, es importante no tomar las repeticiones a la ligera y como meras repeticiones. Es importante recordar que cuando el gurú hace una afirmación, ésta sale de sus labios espontáneamente en ese kshana o fracción de segundo. Para él no es una repetición y, por lo tanto, tiene un significado especial en relación con un contexto o una circunstancia particular. Es importante escuchar cada afirnación del gurú como una lección nueva y no ignorarla como mera repetición. Incluso la buena música se eschcha una y otra vez, generando un gran placer sensual. ¡Cuánto más importante debe ser escuchar la Verdad de los labios del gurú una y otra vez, aunque se trate de la misma Verdad!
En efecto, la vida misma es una repetición en constante rotación. Día tras día, año tras año hay repetición mañana, mediodia, tarde y noche; verano, otoño, invierno y primavera. Pero cada repetición tiene sus propios aspectos que rara vez son similares en todo respecto a repeticiones anteriores. Ramesh S. Balsekar.

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